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Según las investigaciones de CIBERDEM, en
caso de síndrome metabólico el riesgo de su-
frir una enfermedad cardiovascular se duplica
entre los cinco y los diez años después del
diagnóstico. En sólo cinco años será el doble
de probable presentar diabetes mellitus tipo 2.
La
causa principal
según algunos estudios
está en una resistencia a la insulina.
Cuando comemos, nuestro páncreas libera
insulina. Se trata de una hormona que se en-
carga de ayudar a convertir el azúcar de los
alimentos en energía (glucosa) para las células
del organismo.
Cuando nuestro cuerpo se vuelve resisten-
te a la insulina necesita producir más para
que la glucosa penetre en las células. En este
desequilibrio parece estar la causa del síndro-
me metabólico.
¿CÓMOPREVENIRLOYAFRONTARLO?
Los pilares básicos para prevenirlo son la reduc-
ción de peso mediante una alimentación equi-
librada y la práctica regular de ejercicio físico.
DIETA
Hay que seguir una alimentación
sana, variada y equilibrada, en la que no
falten frutas, verduras, cereales integrales,
aceite de oliva y proteínas de alto valor
biológico. Además, debemos limitar el
consumo de sal, grasas saturadas, alimen-
tos ultraprocesados, azúcares y alcohol.
En cualquier caso, lo más adecuado es
ponerse en manos de un profesional que
identifique y corrija los errores nutricio-
nales que se pueden estar cometiendo y
elabore una dieta con un aporte calórico
personalizado.
EJERCICIO
La actividad física moderada
ayuda a prevenir el síndrome metabólico.
A mayor nivel de actividad, menor riesgo.
En general, se aconseja practicar ejercicio
aeróbico (caminar, nadar, bailar…) de for-
ma regular, al menos tres días a la semana
durante más de 30 minutos.
Actualmente, el enfoque terapéutico
del síndrome metabólico es tratar cada
factor de riesgo por separado, lo cual
nos llevaría a pacientes polimedicados.
La fitoterapia y la suplementación
natural también pueden contribuir a
controlar las patologías asociadas al
síndrome metabólico. Algunas ayudas
naturales que pueden ser nuestras
aliadas a la hora de conseguir el
objetivo son:
Levadura Roja De Arroz
Contiene monacolina
K, una sustancia
bioactiva que
contribuye a mantener
los niveles normales
de lípidos en sangre.
Alcachofa
(Cynara scolymus)
Inhibe la formación
de colesterol en el
hígado y facilita su
eliminación con la bilis.
Ácidos grasos
Omega 3
(EPA y DHA)
Ayudan a tener
una buena salud
cardiovascular.
Diversos estudios han demostrado
que ingiriendo la cantidad adecuada
de estos nutrientes se reducen los
triglicéridos, se ralentiza la acumulación
de placa aterosclerótica en las arterias
y disminuye la presión arterial.
Alpiste
(Phalaris canariensis)
Es un cereal de la
familia de las gramíneas
que contribuye a
mantener los niveles
de colesterol y azúcar
en el organismo.
También se le
atribuyen propiedades
antioxidantes.
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